Martín González
Apuesta por el robot clásico
El salmantino José Alberto Martín instaló este otoño en su explotación una unidad de ordeño robotizado VMS Classic buscando mejorar su calidad de vida e incrementar las producciones de sus animales
La falta de mano de obra fue el factor decisivo para que José Alberto Martín diese el salto al ordeño robotizado y desde principios del mes de octubre está ordeñando a sus animales con un robot DeLaval VMS Classic. “El 14 de octubre dejamos totalmente la sala, una espina de pescado 5x5 de DeLaval, y empezamos a ordeñarlas todas con el robot, aunque primero, durante un mes y medio, fuimos metiendo las novillas y las últimas vacas que iban pariendo y, durante unos quince días, dejamos que las demás entrasen a comer, para que se fuesen adaptando”, recuerda el propietario.
Primeros días
“La verdad es que, con todo el cambio, bajaron bastante el rendimiento, pero ya empiezan a recuperar. Es normal, es un cambio muy brusco, sobre todo para las vacas que llevan tiempo paridas y pasaron por la sala”, explica José Alberto, consciente de que, una vez que se estabilice el proceso, su presencia durante el ordeño será mucho más puntual. Por lo pronto, en el momento de nuestra visita, un par de días después de que dejase de usar la sala de ordeño, ya empezaba a ver un repunte en la producción.
Entre las ventajas de este sistema, Francisco Pérez, distribuidor de DeLaval en la zona de Salamanca, señala la movilidad del brazo robótico, el mayor control de lo que ocurre durante el ordeño y la flexibilidad laboral que le confiere al ganadero.
Control desde el smartphone
“Lo que más ha estado empeorando de un tiempo para acá ha sido la reproducción de las vacas y espero que el detector de celos me ayude con esto, para poder ir creciendo hasta llegar a las 50 o 55 vacas en ordeño”, dice Martín, que ve en la aplicación móvil una gran aliada en este sentido.
“Ahora mismo la estoy utilizando para los celos. Creo que es una gran ventaja porque puedo anotar todo directamente en el teléfono. Además, así también puedes ir consultando informes y esto también facilitará el trabajo con el veterinario al tener un mayor control sobre tu ganado”, enumera.
Autosuficiencia eléctrica
Debido a las dificultades para llevar la electricidad a la finca, y para no depender del generador, en esta explotación hace ya tiempo que empezaron a emplear placas solares. Primero, para tener el control del tanque de leche, y ahora, también para el robot.
“Todavía tenemos que ampliar, porque faltan los motores que van en el trifásico. Quiero que, por lo menos, funcione durante el día y luego, durante la noche, como por ahora hay pocas vacas, tampoco hay mucho problema si tiene que arrancar alguna vez el generador. La idea es llegar a ser totalmente autosuficientes con placas y con baterías”, cuenta el propietario.
Mantener antiguos hábitos
En esta ganadería hay dos rutinas que les gustaría mantener pese a la instalación del robot. Por un lado, está la posibilidad de sacar las vacas a pastar en primavera y, por otro, que los animales mantengan la libertad de movimiento entre el corral exterior y la nave. “El cambio en la producción es mínimo, porque, aunque salen un par de horas, después vuelven y comen del carro unifeed. Pero sí me gustaría que, si se puede, salgan cuando estén más a gusto fuera de la nave. Si hace mucho frío o demasiado calor, ellas ya saben meterse directamente en la nave”, explica José Alberto.
Datos de la granja
Localización: Terradillos (Salamanca)
Propietarios: José Alberto Martín González
Número de animales: 75
Vacas en ordeño: 37
Media de producción actual: 31 litros vaca/día
Porcentaje de grasa: 4 %
Porcentaje de proteína: 2,3 %
Recuento celular: 200.000 cél./ml