Bourio
Una relación de tres décadas
La experiencia con DeLaval en la ganadería asturiana Bourio ya viene de largo: hace casi treinta años que comenzaron a trabajar con una sala de esta marca y, desde marzo de este año, lo hacen con dos robots DeLaval VMS™ V300, un cambio por el que se han decidido con la intención de llegar a los tres ordeños diarios, sin que esto les suponga una mayor carga de trabajo
Cuenta David Fernández, uno de los propietarios actuales de Bourio SC, que la pandemia les obligó a retrasar el paso al ordeño con robot, si bien ya habían comenzado a valorar esta posibilidad tras su incorporación a la ganadería familiar en 2019.
Finalizaron el proceso de instalación de las dos unidades del DeLaval VMS™ V300 en marzo de este año.
Ya tenía una sala de ordeño 2x10 de DeLaval, además de tanque, arrobaderas y cepillos de la marca. “Llevamos casi 30 años trabajando con ellos y la verdad es que no miramos mucho otras opciones”, explica Fernández.
“Nos decantamos por este robot por la colocación tan precisa que hace, que funciona por sistema 3D y no por láser como el modelo anterior, pero, sobre todo, por la confianza que tenemos en DeLaval y por la cercanía del servicio técnico, ya que nos parece que con una máquina como esta es fundamental tenerlos cerca”.
Isabel González, encargada de instalaciones de Hermanos Fernández de la Caridad, distribuidores de DeLaval en la zona, recuerda que los factores que llevaron a esta granja a apostar por la robotización fueron fundamentalmente tres: “Querían mejorar el bienestar animal y su calidad de vida; también fue determinante su intención de llegar al tercer ordeño sin que eso implicase aumentar las horas en la explotación”.
En el momento de la entrevista, estaban registrando una media de 2,8 ordeños por animal, con unas medias de producción de 39 litros por vaca y día y unos porcentajes del 3,90% de grasa y del 3,40 de proteína. “El cambio ha sido radical. Seguimos teniendo trabajo, pero es distinto; ahora es mucho más llevadero”, afirman.
Una adaptación sin prisas
Los robots están colocados en paralelo dentro de un mismo patio, “así que las vacas pueden escoger el que prefieran y disponemos de puerta inteligente, el tráfico es guiado”, remarcan.
Antes de empezar a ordeñarse, se aseguraron de que sus productoras estuviesen totalmente familiarizadas con las máquinas y con el nuevo sistema.
“La adaptación suele ser lo más complicado tanto para los animales como para los ganaderos. Tratan de acelerarlo, pero nosotros siempre intentamos que sea un proceso tranquilo, que las vacas se adapten al robot, lo conozcan, se sientan cómodas; las prisas no son buenas”, explica González.
En Bourio SC siguieron este consejo y sobre el proceso de transición cuentan que fue una puesta en marcha sin contratiempos. “Teníamos la premisa de no meterles prisa a las vacas, que fueran entrando solas, y por eso estuvimos mes y medio a pienso. Creemos que fue un acierto”, valora David.
DeLaval OptiDuo™ la próxima adquisición
En Bourio no planean crecer a corto plazo, pero sí continuar en la senda de la automatización de tareas. En este sentido, pronto comenzarán a trabajar con el arrimador de comida DeLaval OptiDuo™. “Junto con los cepillos rascadores, esta es una muy buena herramienta para complementar el equilibrio de la granja en el robot”, explica Isabel.
Incorpora un doble sinfín patentado por DeLaval, que no empuja la comida ni la calienta, sino que la airea, la levanta y la remueve. “Mejora la calidad de la alimentación del animal, ayuda al rumen y también contribuye a aumentar la producción de leche: cuanto más coman, más van a producir”, enumera la técnica. El DeLaval OptiDuo™ también fomenta el acceso a la máquina de ordeño a cualquier hora, “ya que, al levantarse a comer, recuerdan que tienen el robot”, y, por supuesto, reduce la carga de trabajo del ganadero. “En nuestro caso, decidimos instalarlo pensando en el arrimado por las noches y porque, al poner los robots, cada vaca tiene sus horas y las hay que cuando llegan al pesebre no tienen la posibilidad de acceder bien a la comida”, añade David.
Datos de la granja
Localización: Bourio (Castropol, Asturias)
Propietarios: David Fernández, Javier Fernández y Ludi Fernández
Empleados: 1
Vacas en ordeño: 120
Media de producción: 39 litros/vaca/día
Porcentaje de grasa: 3,90 %
Porcentaje de proteína: 3,40 %
Recuento celular: 150.000 cél./ml